viernes, 4 de diciembre de 2009

Cautela

Nunca esperes de mi un "esta bien" o "esta mal", no me siento en condiciones de juzgar a nadie.

Son tantas y tan diversas las propias experiencias de vida que a su vez quedan en evidencia todas las infinitas posibilidades que aún no he experimentado. Por eso, a lo sumo obtendrás un “me gusta” o un, "no me gusta".

Soy una orgullosa madrina del corazón de dos niños hermosos, que vinieron a este mundo a partir de un tratamiento de estimulación asistida -que promoví con todo mi ser-, fruto entre otras cosas del amor, contención, madurez y acompañamiento de una pareja constituida por dos mujeres; que dicho sea de paso, menudo trabajo tendrán al tener que luchar a futuro contra los molinos de viento del prejuicio de nuestra sociedad.

Creo que de aquí en más no necesito seguir aclarando cuál es mi postura frente a éstas nuevas realidades.

Leo posturas que dicen que el modelo tradicional de familia ya no existe, y que con amor todo es posible. Por eso, en este espacio personal y no tanto, y sin entrar en detalles legislativos, sólo quisiera decir que hoy estamos en condiciones de afirmar -con una gran certeza- que: el amor, no lo puede todo.

Para “criar” niños no sólo se requiere de amor, por favor, dejemos de lado las frases hechas, estamos frente a nuevos acontecimientos, de los que aún no tenemos experiencia acumulada y, la vida, es mucho más compleja que eso.

Respetemos al prójimo pero a su vez también seamos cautos.

4 comentarios:

Lua dijo...

Para criarlos se necesita mucha humanidad. Con las contradicciones que ello implica. No soporto las frases hechas en estos temas, me predisponen muy mal, comparto. Calculo que habrá que ser cauteloso en cuanto a los posibles circos romanos que se armen alrededor del tema de las nuevas familias... todo cambia. Por suerte, no, por esfuerzo. Vamos por más Jime. Me encantan los post sobre tus chicos, buenísimos.

Jime dijo...

Gracias Lua!... así es, vamos por más

Maisa dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Maisa dijo...

Cuestión de roles, a mi humilde entender, no de sexos;

de que la sociedad evolucione,

y de que el Estado acompañe esa evolución.

Después que cada uno sienta lo que quiera.

Yo ya he dicho que el puro placer no existe, como tampoco el amor lo puede todo.

Besos!