miércoles, 1 de junio de 2011

Comer, meditar, amar (en versión moderna)

Habemus hecho un viaje que salió como piña! De los nortes de las américas como plan inicial a las europas, no está nada mal.

Hemos conocido seres hasta el momento desconocidos, lugares maravillosos.

Hemos experimentado tristezas, alegrías y desiluciones, señal de que una está viva.

Hemos reflexionado mucho, nos hemos conectado con nuestro ser, con lo más profundo de sus tinieblas, no le hemos temido a eso.

Hemos logrado ese estado de apertura y vulnerabilidad que todo viaje produce en nuestro ser.

Hemos aprendido, una vez más, que no todo lo que brilla es oro, que muchas veces creemos conocer pero que seguimos sorprendiéndonos de lo poco que conocíamos.

Hemos siempre promovido la colaboración, el acompañamiento, el apoyo...el obrar bien. No nos queda duda de ello, del camino, de las formas, sin importar el entorno o las circunstancias...del cuidado amoroso.

Hemos concluído que tenemos la consciencia tranquila, en paz. No hay fantasmas.

Hemos comido, meditado y amado, qué más podemos pedir?

Nada, nada más.

3 comentarios:

gaby, desde bélgica dijo...

LO QUE TE COMPRASTE ES UNA COMPUTADODA O UN TELEFO??

Jime dijo...

un a-cce-so-rio!!

me caigo y me levanto!!

a partir de ahora en buenos aires pareceré una agente especial, Dana Scully, le hablaré a la cartera, en misión especial.

espero no me internen por ello.

Laura dijo...

es un accesorio di-vi-ni-si-mo! Y hace de todo. En breve, le das instrucciones a la cafetera por mail que se prenda aun antes de salir de la cama...