domingo, 25 de julio de 2010

Expandir la fragancia



Fabiana dixit:
Si al final,
abrazarse al dolor,
no nos deja brillar.

Soñé que una señora con un turbante color maíz en la cabeza y un cigarrillo en la boca de costado, me tiraba las cartas de tarot.

Luego dice:
Algo ocurrirá,
tengo una sensación,
una carta guardadda,
un buen signo del sol.

Mi madre me llama para decirme que ella conocía a una tal “Chisuko” que le había tirado a ella las cartas hace 13 años.

Fabiana sentencia:
Nada es para siempre…

Y terminé la noche en la casa de una amiga maravillosa, la que sin buscarlo, me tiró las cartas y a mi pregunta respondió… que estoy transitando el florecimiento interior… que los barrotes de la jaula en realidad no existen, que son una ilusión.

Fabiana culmina con:
Todo vuelve a mí,
una vez más.
Todo vuelve a mí, una vez más...
Una vez más, me aliviarás, me aliviarás...
Todo vuelve a mí una vez más,
todo vuelve a mí, una vez más...
Tan cerca de mí, un vez más...

2 comentarios:

Noesperesnada dijo...

Buen dato ese el de los barrotes, yo intuía que algo de eso había, pero nunca me animé a consultar a una una señora con un turbante color maíz en la cabeza y un cigarrillo en la boca de costado...

Laura dijo...

no se que estas fumando ultimamente, pero sin duda es muy bueno.
Yo quiero.