Están los que por exceso de cautela -o lo que en muchos casos posiblemente se trate de fobia al compromiso-, no se entregan.
Esos que por esa característica diferencial pareciera ser que siempre necesitan marcar cual es su límite y cuál el del otro.
Esos que por ser paradójicamente jugados en infinitos otros aspectos de su vida, reservan lo más íntimo a la privacidad absoluta, como si se encontraran custodiando el santo grial.
También existe la posibilidad de que todo lo que brille no sea oro. En la vida, todo es posible.
Todo.
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3 comentarios:
Tal cual todo.
Y en todos los ámbitos encima.
Me revienta esa gente.
Me dan ganas de decirles "sabés que? metetélo en el culo!"
Sí, soy mal llevada.
mal llevada... no sé... sincerá quizás?, comprometida?, genuina?
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