domingo, 27 de diciembre de 2009

Día Kafkiano

Hoy, 27 de diciembre, hubiera sido el cumple años de mi padre, por ese y otros motivos, decidí despojarme del poco ropaje que aún me cubría, ya era hora… porque el hecho de que sea practicamente agnóstica, no inhabilita que me sienta identificada con el capítulo 3 de Eclesiastes -recomendación de alguien al que quiero mucho-:

“Todo tiene su tiempo, y todo lo que se quiere debajo del cielo tiene su hora. Tiempo de nacer, y tiempo de morir…tiempo de curar… tiempo de llorar, y tiempo de reir… tiempo de buscar, y tiempo de perder…tiempo de callar, y tiempo de hablar; tiempo de amar… tiempo de guerra, y tiempo de paz…”

De bonus track te muestro los primeros minutos de una de sus obras, hablo de mi padre -la realizó hace casi 15 años atrás!!-.

Sepan entender que el original tiene mayor calidad, fue grabado en u-matic, años más tarde digitalizado y hoy pude materializarlo reteniendo la respiración -cámara en mano, desde la pantalla de la computadora-.

Abrigo la esperanza de que Luis Scafati, para quien fue concebido el video, no se sienta molesto por éste homenaje.

PD: dato curioso, mi madre ayer me recordó que mi padre era hermano astral -¿vale la forma de decirlo?- de J. M. Serrat, nacieron el mismo día/mes/año.

3 comentarios:

Maisa dijo...

Conmovedor proceso creativo.

El arte traspasa las fronteras del tiempo, de la muerte, y del olvido.

Profundo legado, mi Reina.

Merecido homenaje.

ylek dijo...

Increible su obra y hermoso tu homenaje!

besoabrazo

La cámara lúcida dijo...

muy conmovedor.