Acuesto a los niños temprano, a eso de las nueve, a partir de esa hora se genera una especie de “timeout”. Pongo música jazz para Nico, así mamá, bien fuerte para que la pueda escuchar.
A partir de allí no hablo más. Abro libro, uso la computadora, miro alguna serie que me guste por un rato.
Y me como mi lámina de chocolate con menta.
Que placer.
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5 comentarios:
No te interrumpiré en tu momento de placer, ni loca, valgame dios de que me saques a patadas, pero voy a acompañarte escuchando el video de Cyndi Lauper, ESO SI ES UN PLACER!!!
UNA PERLA!
Ni hablar, aca se impone a las 9.30 ese placer.
esos son los placeres de la soltería!
Magah, no se me ocurre un solo motivo por el cual sacarte a patadas, podría decirte que no me rompas las bolas... para eso no tengo ningún prutico you know, pero así y todo, no es el caso ;)
muy bien Dos, otra coincidencia que nos une!
claro Lulú, los de no soltería son otros, pero no dejan de ser un placer ;)
prutico= prurito
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