Dejé de usar reloj hace un poco más de 10 años. Me lo saqué el día, o para ser mas exacta, la noche en la que despedí a mi padre.
Esa noche sentí que de algún modo el tiempo se había detenido, y de hecho así fue. No pudo verme recibida ni conocer y disfrutar de sus nietos, no pudo seguir haciendo infinidad de cosas conmigo, y yo tampoco con él.
Regalé todos los relojes pulsera que tenía, inclusive uno antiguo de cadena que había comprado en San Telmo.
Desde aquel momento intenté entrenar mi organismo para reconocer mas o menos el horario en el que estoy, con signos directos –ubicación del sol-, indirectos –hora en la que comienzo a tener hambre nuevamente- y en algunos casos con cierta dificultad -por ej. con el cambio de horario del año pasado se me complicaba un poco-, pero en líneas generales, la identificación aproximada de en qué momento del día estoy, no me sale tan mal.
Descubrí la real esencia de la relatividad del tiempo, de la conexión con nuestro ritmo biológico.
De la naturaleza.
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3 comentarios:
Hay mucha sabiduría en escuchar al reloj biológico.
Y mucha realidad en que nunca es el tiempo preciso para perder a un ser amado.
Si te hubiese visto recibida y con hijos anhelarías que te haya visto "especialista" y que tus hijos lo disfrutaran más tiempo.
Como bien dijiste, el tiempo es relativo.
Las vivencias, no.
Hermoso post...
Mi hijo nacio a las dos semanas de partir mi padre .Hubo muchos Porque justo ahora ? Con el paso del tiempo y reconstruyendo la imagen de viejo para mi hijo me doy cuenta de todo lo que significo ese Hombre y de cuanto lo extraño , pero ya no pregunto lo mismo. Es increible como hablando del "Abuelo " uno hace que permanezca .
Vero
que fuerte Vero eso que contás
mas que ser lo que somos, somos lo que los demás manifiestan de lo que reciben de nosotros
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